martes, 8 de octubre de 2013
tomando como premisa lo que ocurre en la película Carrie, sus productores decidieron promocionarla con un macabro chiste que le hicieron a los clientes de un bar en Nueva York.
El video, que ya tiene casi un millón de visitas en YouTube en menos de un día, muestra a una joven que se enoja con un cliente que le arroja líquido sin querer. La chica comienza a gritar y todo se desmadra: algunas personas terminan contra la pared, al igual que mesas, sillas y libros, todo parte de un efecto especial para atemorizar a los ocasionales consumidores del lugar.
